sábado, 25 de febrero de 2012

Saliendo a tomar algo con amigas

Con la ley actual contra el tabaco, no se puede fumar en los bares, cosa que aplaudo.
Soy la única en mi círculo de amigas del barrio de toda la adolescencia (de toda la vida no porque no coincidimos hasta el instituto) que no fuma, bueno hay otra pero está en Bratislava...
El caso es que cuando quedamos, alguna de ellas conmigo, se da un nuevo concepto de desglose del grupo, algo parecido a cuando vas al baño acompañada, o a veces no:

- Siendo 2, la otra no fuma hasta que no salimos del bar.
- Siendo 3, salen a fumar por tandas de a uno para que yo no quede sola mirando a la pared y me den conversación, jejeje.
- Siendo 4, sale primero una pareja y la que resta debe salir a fumar sola, porque siempre tiene que haber alguien conmigo.
- Siendo 5, sí que pueden salir por parejas y no hay problema de que nadie se quede solo.
- Estando las 6, como Kris y yo no fumamos nos quedamos juntas y todas las demás salen a fumar en grupo.

Lo que me llama la atención de todo esto es que tienen la conciencia de que yo, ex-fumadora y no fumadora ya actualmente, no puedo quedarme sola en el bar pero sí una de ellas puede salir sola a meterse su chute de nicotina y demás guarrería que tiene el tabaco (fíjate en el esquema de arriba a la derecha que te lo explica mu requetebien). Si es que son unos soletes!! :)

Laura

viernes, 17 de febrero de 2012

¿Cómo es posible?

Se leen en los periódicos que, aunque haya crisis y mucha gente haya llegado a la pobreza absoluta, hay un 0,5 % más de gente que ha comenzado a fumar. ¿Pero estamos locos o qué?
He de decir que sigo sin fumar, no niego que a veces el humo del cigarrillo recién encendido me guste pero sigo en mis trece. Además, teniendo en cuenta que una cajetilla de Fortuna, de las que yo fumaba hace casi casi 5 años, cuesta ahora 3,85€ en lugar de 2,65€ que fue cuando lo dejé yo es una barbarie!!
Recuerdo aquellos tiempos hace 10 años en que el Euro entrón en nuestras vidas sin nosotros quererlo, y la cajetilla de Marlboro costaba 2,40€ y era una burrada (400 de las antiguas pesetas!!). Ahora cuesta 4,25€ (corregidme si me equivoco con los costes pero lo estoy buscando en San Google porque YA no estoy familiarizada con esto). Esos 4,25 serían 708 pesetas. ¿Alguien en su sano juicio pagaría esa cantidad en pesetas por una cajetilla de muerte en pequeñas dosis?
Hay gente de mi entorno que, por varios motivos, ha dejado de fumar y les insto a que sigan adelante, hasta el final del camino. Los primeros meses son difíciles pero hay que aguantar si queremos ganar la batalla.

Con coraje, valor y fuerza de voluntad todo se puede conseguir! (a ver si esto me lo planteo yo cn la dieta, jejeje).

Laura